Franz Kafka fue un escritor praguense
judío de finales del siglo XIX y principios del XX. Es sabido que su obra es
una de las más influyentes de la literatura universal, ya que trata diversos
temas como los conflictos entre padres e hijos, la brutalidad física o
psicológica, entre otros.
Fue escritor de diversos relatos
cortos, entre los que destacamos La Metamorfosis
y de tres novelas. Además, nos han llegado algunos escritos autobiográficos.
Cabe decir que la mayoría de sus obras se publicaron después de su muerte,
gracias a un amigo; no obstante, hubo alguna obra que si decidió publicar el
propio Kafka en vida.
Hay diversas interpretaciones de
la obra de Kafka. Se le relaciona con el marxismo o el anarquismo, entre otros.
Por otro lado, es importante
decir que diversos autores, como Jorge Luis Borges o Gabriel García Márquez se
encuentran influenciados por este autor.
Este relato narra la vida de
Gregorio Samsa, el protagonista de la historia, quien, en un principio
trabajaba en un almacén y era el principal sustento económico de su familia.
Todos dependían de él, hasta que, de la noche a la mañana, se convirtió en
insecto.
Fue a partir de este momento
cuando la situación empezó a cambiar. Poco a poco la vida de Gregorio empezó a
preocuparse y empezó a sentir el rechazo de su familia por su nuevo aspecto.
Finalmente, debido al trágico
desenlace de la historia, acaba el sufrimiento de los Samsa.
Me gustaría recomendar esta
novela, porque veo en ella una metáfora con la vida real. Hay ocasiones en las
que nos gusta algo o alguien solamente mientras desempeña una labor que nos
conviene. Es decir, cuando dicha labor finaliza, se muestra realmente el
interés de alguien hacia el otro. Creo que ésta es una actitud que podemos
apreciar tanto en la obra de Kafka como en nuestra vida cotidiana.
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